Herramienta 3: ISO 22320: Gestión de emergencias: directrices para la gestión de incidentes
La cantidad de tipos de incidentes que han tenido que afrontar en los últimos años las empresas, ha sido significativa, y es que ahora, los factores externos de riesgo han ido incrementado. Debido a esto, la búsqueda por gestionar apropiadamente distintos tipos de incidentes se ha convertido en uno de los grandes desafíos que afrontan las organizaciones que buscan ser resilientes.
ISO 22320 pretende ser una guía para que las empresas sean capaces de gestionar todo tipo de incidentes. Esta norma se basa en que la organización deberá identificar las funciones que son necesarias y que, por lo tanto, deberán estar disponibles sin importar la cantidad de personas que se tengan. Esto permitirá que la empresa siga operando, a pesar del tipo de incidente.
Para lograr esto, la organización establecerá un proceso de gestión de incidentes que considere una combinación de todos los recursos con los que se cuenta, así como una contribución activa de los empleados. Este proceso recopila la información necesaria para evaluar la situación e identificar las contingencias.
Lograr que la empresa mantenga la rentabilidad y competitividad durante un largo tiempo, requiere que la organización esté siempre preparada para afrontar todos los cambios, sin importar si estos son pequeños o grandes, la resiliencia organizacional se logra con un compromiso activo por mejorar cada aspecto dentro del sistema de gestión.